- 1.adaptacion de marcha
Foro y Blog Semana Santa Sevilla
01/03/2012
A ti querida Marta para que estos brazos te mantengan en estos malos momentos...
Foto de Marta María de Triana a la que está dedicado el blog.
A tus brazos regresar en una tarde temprana
para quedarnos en ellos enamorandose el alma
en esa dulzura hermosa que se derrama en tu estampa
y se desliza en Tu rostro, el de Madre tan amada.
Foto de Marta María de Triana a la que está dedicado el blog.
A tus brazos regresar cuando la vida no acaba
simplemente se transforma en esa hora tan larga
que por siempre deja el alma en Tus brazos enredada,
para estar en la gloria que me prometes callada.
Y en tus brazos, Señora, quedar contemplando Tu cara
en la celestial certeza de estar siempre Esperanzada
iluminado por siempre por la Estrella más cercana
la que eres Tú, Madre, junto a ti la eterna gracia.
Salvador ya está para siempre en sus brazos.
Saludos.
Trompeta-sangre.
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No se puede estar en mejores brazos. Bonito detalle el ke has tenido Ana con Martita.
Un besote desde Triana.-
Precioso texto como nos tienes acostumbrados, lleno de amor y sobre todo de sensibilidad ante la perdida de un ser muy querido como es un padre, gracias a ti y un enorme beso a Marta, que estoy más que segura que sentirá el consuelo de las personas que la quieren.
Gracias por estos hermosos versos dedicados a mi amado padre que ahora tiene un lugar privilegiado donde ver a sus Esperanzas y a su Estrella, las tres E, del firmamento celestial: ESPERANZA DE TRIANA-ESPERANZA DE LA TRINIDAD Y ESTRELLA.
Ya sabes que mi padre estaba muy vinculado también a la Trinidad porque estuvo 10 años interno en los Salesianos de allí. Nunca se perdía una salida cada Sábado Santo, hasta que sus piernas se lo permitieron.
Y todas las semanas, íbamos él y yo a nuestro paseo dominical de cada mañana a ver a su Esperanza de Triana (tiene la cartera llena de fotos de Ella) y a su Estrella. Daba lo mismo si estaba lloviendo, tronando o venteando. Ibamos sí o sí.
Cada Domingo de Ramos se ponía en cola con su traje azul marino y su corbata para ver los pasos de su hermandad de la Estrella con la medalla puesta. Y el Viernes Santo por la mañana nos íbamos al Baratillo para ver allí a la Esperanza de Triana y cuando ya no podiamos, simplemente nos íbamos a la capilla de la Estrella.
Últimamente como ya no podía andar mucho iba a Pagés del Corro y allí se apoyaba en un coche y cuando la veia aparecer se le llenaban los ojos de lágrimas y le pedía salud para poder volver a verla al año siguiente.
Tal como ha dicho JJ en su blog, mi padre era un buen cofrade y a él le debo lo que soy hoy en día UNA JARTIBLE.
Un besazo enorme Ana y gracias por estar ahí...
Martita
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