Encuentro entre las dos Esperanzas...

Hola amigos, hoy al ver que Manuel Garrido ha presentado un libro de poemas en honor a Ntra. Sra. de la Esperanza de Triana, me ha venido a la memoria cuántas retransmisiones por canal sur televisión de la madrugá he tenido el placer de disfrutar escuchando a este señor y viendo las imágenes tan buenas. Todo un disfrute para los sentidos. No se me olvidan, habiendo pasado años y años las palabras que le decía a mi Macarena de mi alma y de mi corazón.
Recuerdo que en una retransmisión grabada, que tengo que tener por ahí la cinta seguro estropeada de tantas veces haberla visto, este hombre había imaginado un encuentro entre ambas Esperanzas el día en el que a la Macarena la coronaron canónicamente, quién iba a imaginar que esto, años más tarde, se haría realidad por humor de la lluvia que permitió que los dos anhelos de Sevilla y de Triana estuvieran frente a frente en aquella mañana de viernes Santo, inenarrable. Bueno pues a lo que iba, este hombre pronunció unas palabras que a mí se me quedaron, seguro que no son exactas pero voy a tratar de reproducirlas porque ya os digo aún hoy las llevo grabadas pero no en aquella cinta que quizás ya ni se vea, sino en mi corazón:

-Buenos días Macarena.
-Buenos, días Trianera, temí que ya no vendrías.
-Pues habría de faltar, si era tan grande mi anhelo que se me fue el santo al cielo, y he dejado en el altar olvidado mi pañuelo.
-Pañuelo? para qué llanto, que no es día para penas, y de inquietudes me llenas si te han de causar quebranto las venturas macarenas.
-Mi llanto no te atormente, que si lloro es de alegría, y cada lágrima mía será una flor que en tu frente florecerá en este día.
-Estoy como transtornada, qué jaleo! qué barullo! de veras que me aturrullo y es que verme tan mimada está tentando mi orgullo.
-Y qué otra cosa has de hacer? Que por mostrarte sencilla, estrella que tanto brilla no debe palidecer en el cielo de Sevilla...
(Y sonríen, y suspiran y la cara se les llena de una alegría serena cuando a robadas se miran Triana y la Macarena.
Para adornar tu corona Macarena sevillana, te trajo muy de mañana la rosa de su persona, la Esperanza de Triana).

Pedir mil disculpas a Don Manuel Garrido, pero la verdad es que tenía ganas de cantarlo a todo el mundo, me pareció y me parece precioso que alguien pueda describir con palabras tan bellas, un momento indescriptible. Y pedir mil disculpas a los cofrades que leais este primer post mío, no soy una virtuosa de las letras, solo cofrade sevillana, que intenta transmitir con sus mensajes y sus palabras lo que es sentir la semana santa y el amor al Señor y a su madre bendita.

Un abrazo a todos, y feliciz aniversario trianeros, ya vais a tener en la calle a la Esperanza, Amalia.